Albherto's Blog
Argonauta, en busca del Vellocino de Oro. Una navegación diaria por la blogosfera… ¡ y hasta aquí puedo escribir !

Mónaco se viste de blanco


BODA REAL

Mónaco, el principado de hormigón y papel couché

  • Decir Mónaco es decir Grimaldi.
  • La boda que tendrá lugar este fin de semana entre Alberto de Mónaco y Charlene Wittstock realimenta el mito y hace girar la manivela del ‘glamour’ en tiempos en que las ruletas ya no dan tantas vueltas como antaño.
  • La Place du Casino concentra las esencias del mito monegasco.
  • En pocos metros puede disfrutarse de los coquetos jardines de Boulengrin, del legendario edificio del Casino, del Hotel y el Café de París, del restaurante Luis XV y de ese paisanaje extraordinariamente peculiar que frecuenta tan lujosos escenarios.
  • Al atardecer, una copa en el Sea Lounge, el lugar de moda con vocación de sustituir al legendario Jimmy’z, es el broche de oro de esa jornada de la seguramente hablaremos ad eternum (sí, lo confieso, me he topado con Carlota Casiraghi en la piscina y se lo he contado a todo bicho viviente con el que me he topado).

La boda Real

Vicky Vilches… martes 28/06/2011

Cuando uno pone por primera vez los pies en Mónaco tiene la curiosa sensación de que se encuentra en un escenario en cierto modo familiar. Quizá sea porque estamos en el feudo de los Grimaldi, esos parientes de papel couché con los que nos unen múltiples lazos. Adoramos las películas de Grace Kelly, seguimos desde hace décadas las andanzas de Carolina y sus cachorros en las páginas del ¡Hola!, detestamos las intervenciones de Alberto de Mónaco en el COI…

Decir Mónaco es decir Grimaldi. Este vínculo emocional de amor-odio-admiración-saturación condiciona la mirada del visitante que por unas razones u otras forma parte de los 4,5 millones de turistas que acuden anualmente al segundo estado más pequeño del mundo. Mónaco no se visita, se aspira a vivirlo, aunque sea por unas horas, por unos días.

El áspero peñón se ha convertido en un extraño imán para quienes desean catar el sabor nada amargo del lujo, impregnarse in situ del peculiar aroma del glamour principesco que nos traen las revistas cada semana. La sensación de perpetua e irreal felicidad se hace estos días aún más patente. La foto oficial del compromiso de su Alteza Serenísima el Príncipe Alberto con Charlene Wittstock está presente en escaparates, hoteles, restaurantes. Desde hace semanas se pueden adquirir souvenirs del enlace. Las calles empiezan a engalanarse. Ya se espera a los primeros invitados.

Alberto de Mónaco hizo público que tiene dos hijos de dos madres distintas, Alexandre Eric Stéphane, que nació en París en agosto de 2003 (y al que reconoció en julio de 2005), y Jazmin Grace Rotolo, californiana nacida en 1992, y de la que hizo pública su paternidad en junio de 2006. Ninguno de ellos podrá heredar el trono del Principado al haber sido concebidos fuera del matrimonio.

Paraíso fiscal

La segunda impresión del pueblo de nuestros parientes más conocidos del mundo del corazón es que en su pequeño principado no cabe ni un centímetro cúbico más de hormigón. Y sin embargo todavía hay grúas encaramadas a las rocas, apartamentos en construcción para ricos poco amigos de los impuestos que buscan vistas al paraíso (fiscal) o ganan terreno al mar.

Charlene Wittstock y Alberto de Mónaco.

Charlene Wittstock y Alberto de Mónaco.

La saturación de edificios que impulsó Aristóteles Onassis eclipsa completamente los viejos encantos de la belle epoque y transmite una sensación agobiante, similar a la que se puede sentir en Hong-Kong o Benidorm. Lo más sensato tras el shock inicial es salir corriendo en busca de la tranquilidad del exquisito Cap Ferrat o de la amplitud del Promenade des Anglais de Niza. Pero el espectáculo atrapa inexplicablemente como si Montecarlo fuera un culebrón. ¿Es Mónaco un destino turístico sobrevalorado?

La respuesta es no en una sociedad tan mitómana y entregada al show permanente como la actual, fascinada por la opulencia y el glamour. La oficina de turismo se jacta de que principado disfruta de 300 días de sol al año. Quizá debería incluir los que ofrece espectáculo: 65 más. Todo el año es carnaval en el enclave de la tierra más densamente poblado. Los grandes acontecimientos como el Gran Premio de Fórmula 1, el Torneo de la ATP, las galas benéficas son sólo los picos de este espectáculo non-stop. En el fondo, hablar del Circo de Mónaco es pura redundancia.

Rubias en Lamborghini

Rubias sin edad determinada y bronceado permanente descienden de Lamborghinis naranjas. Aquí se puede comprobar que las puertas del Rolls Royce Gosht se abren al revés, que los nuevos oligarcas rusos se toman la revancha de los años de precariedad soviética, que los chinos se sienten tan atraídos por Hermes y Chanel como los japoneses.

Montecarlo no era más que un huerto de olivos y naranjos hasta que el prodigioso tándem Carlos III- Françoise Blanc cambió el destino del principado para siempre al convertirlo en destino de recreo de las elites internacionales. Las probabilidades de codearse con los «happy few», incluidos los Grimaldi, son elevadas.

Si en el Casino se busca suerte con la ruleta, la fortuna de toparse con la princesa Carolina o alguno de sus estupendos cachorros ha de buscarse en el célebre Beach Club. No hay que dejarse intimidar por los extraordinarios deportivos que flanquean la puerta, el acceso está abierto a todo el que quiera o pueda pagarlo. Por algo más de 60 euros puede uno pasarse el día entre ricos y famosos que chapotean en sus célebres piscinas o en el mar.

Mónaco es un logo

Es curioso que un sitio tan pequeño –la mitad de Central Park- dé para tanto. Mónaco se puede vivir a todo plan con un presupuesto sin límites hospedándose en el lujoso Hotel de Paris, disfrutando de la exquisiteces del chef Alain Ducasse o rejuveneciéndose en uno de los mejores y más caros spas de Europa. También se puede ir de turista por muy poco dinero y disfrutar de un día viendo un palacio de postal, bellos jardines llenos de esculturas, soberbios mega yates, contemplar las bonitas vista de la Riviera o pasear por la calle más cara del mundo, la Avenida Princesa Grace.

El Beach Club del Casino.

El Beach Club del Casino.

La boda que tendrá lugar este fin de semana realimenta el mito y hace girar la manivela del glamour en tiempos en que las ruletas ya no dan tantas vueltas como antaño. Los ingresos por el juego han caído, hay menor afluencia de turistas y no hay más espacio para tapizarlo de hormigón y vender pisos de 20 millones de euros. Mónaco se convierte en una marca, en un logo que hay que exportar.

El Beach Club abre en septiembre sucursal en la isla de Saadiyat, en Abu Dhabi. La famosa Sociedad de Baños de Mar aspira poner bandera en Londres y Paris en los próximos años. Quizá en 20 años Mónaco llegue hasta China. Coincidiendo con la boda, Hollywood estrena comedia romántica con el imbatible título Monte Carlo. En Mónaco nunca se sabe dónde termina el país donde comienza la vida de la familia Grimaldi, que hay de realidad y que hay de ficción en esta peculiar argamasa de hormigón y papel couché.

El patio tomará la forma de una catedral, con suelos alfombrados, paredes pintadas y techos entoldados. Las puertas del palacio permanecerán abiertas para que todos los monegascos y visitantes puedan acudir a ver a la pareja nupcial.- Los trabajadores preparan el patio principal en el Palacio de Mónaco, donde se celebrará la ceremonia religiosa. Este patio ha sido tradicionalmente el escenario para los principales eventos de la Casa Real Monegasca, como la ceremonia de ascenso al trono del Príncipe de Mónaco.- El palacio está preparado para la boda, que también podrá verse a través de cinco pantallas gigantes que se colocarán en las calles de Mónaco. Los 3.500 monegascos están invitados a participar en los festejos. El patio de honor del palacio de Mónaco se prepara para la boda del príncipe Alberto II y su todavía prometida, la exnadadora sudafricana Charlene Wittstock. La ceremonia religiosa se celebrará el sábado, 2 de julio, a partir de las cinco de la tarde en este patio, que los operarios ya preparan para el enlace.- BRUNO BEBERT (EFE)

Niza es el aeropuerto internacional de la Costa Azul, situado a 28 kilómetros de Cannes. Air Nostrum opera diariamente la ruta Madrid-Niza y Barcelona-Niza hasta con cinco frecuencias diarias y es la única compañía que ofrece vuelos directos. Desde 200 euros por trayecto.

Existen diversas líneas de autobús que unen el aeropuerto de Niza con el centro del Principado. También se puede hacer el recorrido en helicóptero en unos siete minutos por un importe de 110 euros, más o menos el mismo precio que cuesta ir en taxi.

Los encargados de la pirotecnia dan los últimos retoques a la pirotecnia que se verá en el puerto de Hércules de la ciudad de Montecarlo la medianoche del día 2, como fin de fiesta a las celebraciones por el enlace del soberano monegasco.- Tanto el viernes 1 (día del enlace civil) como el sábado 2 (cuando se celebrará la ceremonia religiosa) los festejos culminarán con sendos espectáculos de fuegos artificiales. Durante esta semana se está probando el espectáculo pirotécnico en la playa del principado.- JEAN-SEBASTIEN EVRARD (AFP)

Mónaco dispone de 2.600 habitaciones repartidas en 18 hoteles de lujo. Los más célebres pertenecen a la Sociedad de Baños de Mar, participada en un 69 por ciento por la familia Grimaldi.

Las opciones más lujosa y legendarias son el Hotel de Paris (desde 430 euros habitación/noche) y su vecino el Hotel Hermitage (desde 385 euros).

Con precios ligeramente inferiores, el Fairmont Monte Carlo y el Monte Carlo Beach ofrecen alojamientos a pié de costa.

Las opciones más económicas hay que buscarlas en las localidades vecinas de Cap d-Ail o Menton

Una furgoneta parte de los preparativos de Mónaco, junto al palacio monegasco, lleva un cartel con el nombre de la pareja y un sonoro «Vivan los novios».- BRUNO BEBERT (EFE)

El restaurante Louis XV es uno de los mejores de Europa y uno de los más prestigiosos del universo Alain Ducasse. Situado dentro del Hotel de Paris, ofrece una extraordinaria gastronomía francesa de la mano de Franck Cerutti y toda la pompa del palacio.

Opciones más informales y económicas pueden encontrarse en el popular Stars ‘n’ Bars, con hamburguesas en el menú y coches de carreras colgados en el techo, y en la infinidad de pequeños establecimientos donde saborear una pissaladiere, un tipo de pizza típico de la zona de Niza.

El Café de Paris es el sitio indicado para observar las criaturas que pululan junto al Casino.

Los operarios ultiman los detalles de los festejos del enlace de Alberto y Charlene, que comenzarán el jueves 30 con un concierto y diversas recepciones y finalizarán el sábado, día 2, a medianoche.- ERIC GAILLARD (REUTERS)

Todo listo en Mónaco

Hasta las tiendas de lencería, como se puede ver en la foto, se preparan para la boda del siglo en Mónaco. El Príncipe Alberto y su prometida Charlene Wittstock se darán el sí quiero el próximo fin de semana. Para ello, el pequeño principado se engalana para una boda soberana con intenciones de fiesta popular.

….oOo….

No hay respuestas to “Mónaco se viste de blanco”

Deja un comentario